La Medicina Regenerativa ofrece soluciones innovadoras para problemas como la pérdida de cabello.
La bioestimulación capilar es un tratamiento que busca revitalizar el cuero cabelludo mediante la activación de los folículos pilosos. Este procedimiento utiliza factores de crecimiento y nutrientes esenciales para promover la regeneración celular, mejorando la calidad y densidad del cabello.
Al combinar avances en medicina regenerativa con técnicas personalizadas, estos tratamientos ofrecen resultados naturales que mejoran tanto la apariencia como la salud capilar.
Este protocolo contribuye a:
Estimula el crecimiento capilar: Reactiva los folículos inactivos, promoviendo el crecimiento de nuevo cabello.
Mejora la calidad del cabello: Aumenta el grosor y la resistencia del cabello existente.
Fortalece el cuero cabelludo: Favorece un ambiente saludable para el desarrollo capilar.
Es seguro y no invasivo: Utiliza componentes naturales para estimular la regeneración.
El PRP capilar, o Plasma Rico en Plaquetas, es una técnica que utiliza las propias plaquetas del paciente para potenciar la regeneración capilar. El procedimiento consiste en extraer una muestra de sangre, centrifugarla para separar el plasma rico en plaquetas y aplicarlo directamente en el cuero cabelludo mediante microinyecciones.
Las plaquetas contienen factores de crecimiento que estimulan la actividad celular en los folículos pilosos, promoviendo la reparación y regeneración de tejidos. Esto resulta en un aumento de la densidad capilar y una mejora general en la salud del cuero cabelludo.
Estimulación natural: Utiliza los recursos del propio cuerpo para favorecer el crecimiento capilar.
Resultados visibles: Mejora la densidad y calidad del cabello tras pocas sesiones.
Previene la caída: Fortalece los folículos, reduciendo la caída excesiva del cabello.
Procedimiento rápido y seguro: Se realiza en consulta y no requiere tiempo de recuperación prolongado.
Estos procedimientos son ideales para personas que:
Presentan pérdida de cabello moderada a severa.
Desean mejorar la densidad y calidad del cabello.
Buscan opciones no quirúrgicas y naturales.
No tienen contraindicaciones como ciertas enfermedades crónicas o infecciones activas.
Después del tratamiento, es importante seguir las indicaciones del especialista para maximizar los resultados. Algunos cuidados incluyen:
Evitar el lavado del cabello durante las primeras 24 horas.
No exponer el cuero cabelludo a la luz solar directa o fuentes de calor.
Mantener una dieta equilibrada y adecuada hidratación.
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